“Para ayudar a los indígenas no politizados”
“Para ayudar a los indígenas no politizados”. No, esta frase no pertenece a un oficial colonial franquista en los años 50, refiriéndose a los habitantes de Ifni, del protectorado de Marruecos, de Guinea Ecuatorial o del Sahara Español. Esta frase tan desagradable que chirría en nuestros oídos del siglo XXI, estas palabras que repugnan a estas alturas de la historia las ha pronunciado hace pocos días un tal Pepe Muñoz, hermano del famoso Kitín. Poco sabemos de la biografía de Pepe Muñoz, mucho más de la de su hermano, uno de los grandes valedores de “la cara amable” de Marruecos, pero intuimos que los dos siguen caminos muy similares, al menos en lo que respecta a lavar la cara del régimen marroquí y sacar buen partido por ello.
Según la revista Tiempo Pepe Muñoz prepara un nuevo festival, supuestamente cultural, en El Aaiun, “para ayudar a los indígenas no politizados”, un festival para el que quiere contar con artistas como David Bisbal y Rafael Amargo. Ya conocemos cómo son estos festivales que “cocina” Marruecos en las zonas ocupadas, el Festival de Dajla, el Festival Rawafid Azawane de El Aaiun, o el festival de Tan Tan. Este último lleva ya varias ediciones, y aunque se celebra en territorio de Marruecos, se utiliza para reiterar la “marroquinidad” de los saharauis. Tan Tan es un territorio habitado casi en su totalidad por saharauis y en este festival, patrocinado por la UNESCO y donde Kitin colabora activa y remuneradamente, se hace una estudiada mezcla de “tribus del desierto”, “nómadas”, “habitantes del Sahara” y saharauis. En él se suele invitar a viejas glorias del cine, la canción o la más rancia prensa rosa, y multitud de periodistas a quienes pagan el viaje y reciben múltiples atenciones y que a cambio ayudan a “vender” esa farsa cultural, exótica y aventurera. En el llamado “Moussen de Tan Tan” se mezcla a los saharauis con otras “tribus del desierto”, en una de esas ceremonias de la confusión que tanto gustan a Marruecos. En el evento, patrocinado por la UNESCO, se usa la figura de Mohamed El Aghdaf, uno de los hijos del mítico Chej Ma El Ainin, nacido en 1875 y cuya tumba se encuentra precisamente a las afueras de Tan Tan. “Esta nueva versión del Moussen de Tan Tan hace de este festival una reunión tribal y un núcleo cultural, además de una atracción turística y un homenaje al modo de vida tradicional de los nómadas”, se afirma en la página de la UNESCO.
Otros festivales, esta vez realizados en los territorios ocupados, son el “Dakhla Festival Morocco”, donde se mezcla música, windsurf, negocios, turismo y la exaltación de un Sahara marroquí utilizando la coartada de la cultura. También se viene realizando dese 2007 el Rawafid Azawane, en la ciudad ocupada de El Aaiun, dirigido por Hamdi Uld Rachid, hermano del poderoso Jalihena Uld Rachid, presidente del CORCAS. Hamdi Uld Rachid es Presidente del grupo Rijal Sakia el Hamra. La empresa que preside expolia ilegalmente los recursos naturales del Sahara Occidental, dedicándose en especial a la exportación de arena saharaui (más de 600.000 toneladas), así como pescado.
Bajo la etiqueta de “turismo cultural sostenible” que enarbolan los hermanos Muñoz, Kitin es por cierto Cónsul Honorario de Marruecos por designación de Mohamed VI, se esconden un montón de negocios de todo tipo en un territorio ocupado ilegalmente y del que Marruecos no es más que potencia ocupante. Además se utiliza para confundir, desvirtuar la auténtica identidad saharaui y como herramienta interesada para reafirmar la “marroquinidad” del Sahara Occidental. Estos festivales no son ni mucho menos inocentes, más aún cuando la UNESCO patrocina y colabora en alguno de ellos, de momento no en los celebrados en territorios ocupados pero sí en Tan Tan. Son actos contrarios a la legalidad internacional y todas las organizaciones políticas, activistas contra el expolio de recursos naturales y activistas de derechos humanos en las zonas ocupadas repudian estos eventos que tratan de enmascarar la realidad que se vive en las zonas ocupadas. Creo que desde aquí debemos también poner todos nuestros esfuerzos en condenarlos y denunciarlos.
Es de desear que la voraz ambición de los Muñoz no se dirija al Sahara Occidental, y que dejen en paz a los saharauis, a los politizados y a los que no lo están.
Según la revista Tiempo Pepe Muñoz prepara un nuevo festival, supuestamente cultural, en El Aaiun, “para ayudar a los indígenas no politizados”, un festival para el que quiere contar con artistas como David Bisbal y Rafael Amargo. Ya conocemos cómo son estos festivales que “cocina” Marruecos en las zonas ocupadas, el Festival de Dajla, el Festival Rawafid Azawane de El Aaiun, o el festival de Tan Tan. Este último lleva ya varias ediciones, y aunque se celebra en territorio de Marruecos, se utiliza para reiterar la “marroquinidad” de los saharauis. Tan Tan es un territorio habitado casi en su totalidad por saharauis y en este festival, patrocinado por la UNESCO y donde Kitin colabora activa y remuneradamente, se hace una estudiada mezcla de “tribus del desierto”, “nómadas”, “habitantes del Sahara” y saharauis. En él se suele invitar a viejas glorias del cine, la canción o la más rancia prensa rosa, y multitud de periodistas a quienes pagan el viaje y reciben múltiples atenciones y que a cambio ayudan a “vender” esa farsa cultural, exótica y aventurera. En el llamado “Moussen de Tan Tan” se mezcla a los saharauis con otras “tribus del desierto”, en una de esas ceremonias de la confusión que tanto gustan a Marruecos. En el evento, patrocinado por la UNESCO, se usa la figura de Mohamed El Aghdaf, uno de los hijos del mítico Chej Ma El Ainin, nacido en 1875 y cuya tumba se encuentra precisamente a las afueras de Tan Tan. “Esta nueva versión del Moussen de Tan Tan hace de este festival una reunión tribal y un núcleo cultural, además de una atracción turística y un homenaje al modo de vida tradicional de los nómadas”, se afirma en la página de la UNESCO.
Otros festivales, esta vez realizados en los territorios ocupados, son el “Dakhla Festival Morocco”, donde se mezcla música, windsurf, negocios, turismo y la exaltación de un Sahara marroquí utilizando la coartada de la cultura. También se viene realizando dese 2007 el Rawafid Azawane, en la ciudad ocupada de El Aaiun, dirigido por Hamdi Uld Rachid, hermano del poderoso Jalihena Uld Rachid, presidente del CORCAS. Hamdi Uld Rachid es Presidente del grupo Rijal Sakia el Hamra. La empresa que preside expolia ilegalmente los recursos naturales del Sahara Occidental, dedicándose en especial a la exportación de arena saharaui (más de 600.000 toneladas), así como pescado.
Bajo la etiqueta de “turismo cultural sostenible” que enarbolan los hermanos Muñoz, Kitin es por cierto Cónsul Honorario de Marruecos por designación de Mohamed VI, se esconden un montón de negocios de todo tipo en un territorio ocupado ilegalmente y del que Marruecos no es más que potencia ocupante. Además se utiliza para confundir, desvirtuar la auténtica identidad saharaui y como herramienta interesada para reafirmar la “marroquinidad” del Sahara Occidental. Estos festivales no son ni mucho menos inocentes, más aún cuando la UNESCO patrocina y colabora en alguno de ellos, de momento no en los celebrados en territorios ocupados pero sí en Tan Tan. Son actos contrarios a la legalidad internacional y todas las organizaciones políticas, activistas contra el expolio de recursos naturales y activistas de derechos humanos en las zonas ocupadas repudian estos eventos que tratan de enmascarar la realidad que se vive en las zonas ocupadas. Creo que desde aquí debemos también poner todos nuestros esfuerzos en condenarlos y denunciarlos.
Es de desear que la voraz ambición de los Muñoz no se dirija al Sahara Occidental, y que dejen en paz a los saharauis, a los politizados y a los que no lo están.
ACTUALIZACION: Los ocupantes en el Sahara están empezando a intentar atraer a su "causa" a artistas, al estilo de lo que los apoyos en el mundo de la cultura e intelectual que logra la causa pro saharaui. Aunque se trate de artistas más bien en horas bajas como Rafael Amargo, Rosa López o las Ketchup. Tal vez no sabían del todo donde se estaban metiendo, pero esta pasada Semana Santa viajaron al Sahara ocupado para participar en la "II edición del Festival de la Infancia" de El Aaiún. Según la prensa los artistas españoles "recaudaron fondos destinados a ayudar a los niños huérfanos y a mejorar las condiciones precarias de la ciudad". También colaboraron en la posterior subasta benéfica que se celebró algunos futbolistas del Real Madrid como Raúl González, poco dados a colaborar con los refugiados saharauis, como ha demostrado varias veces este club cuando se le han requerido equipamentos para hacer deporte.
0 comentarios:
Publicar un comentario